El Parlamento Europeo ha hecho caso a las miles de voces que pedían el rechazo a la moción que planeaba restringir el uso de antibióticos veterinarios en la Unión Europa, y la ha rechazado en votación plenaria.
La moción partió de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria (ENVI) del Parlamento Europeo, que proponía la prohibición del uso en animales de todos los antimicrobianos señalados como críticos de máxima prioridad por la OMS. A pesar de que la propia Organización Mundial de la Salud y otros organismos veterinarios y científicos habían desaconsejado esa prohibición, la moción para prohibir su uso en animales domésticos o de producción siguió adelante.